Cold is the new warm * Asger*

-Hambree!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! -

Tenia mucha hambre, me sentía una especie de devorador cárnico en ese momento aunque en verdad lo era... eso o algo muy parecido. Acababa de llegar de vuelta al campamento, lo ansiaba cada año, era la forma de escapar de la locura de casa por un rato, la ultima novedad de Papá era que su nueva esposa y él celebrarían con orgullo a su hijo, baa nunca me tuvo mucho interés así que agradecía que el niño le medio llenara el ojo y dejara de presionarme a mi, también esperaba que por fin dejara a mi madre en paz, pese a estar separados siempre acudía a buscarla esperando amor de su parte, se molestaba a muerte cada que recibía una patada en el trasero cortesía de mi mamá, era algo que nadie sabía y no comentaba pero me mataba de risa cada que pasaba.

"Klaus Nordraak siempre amo a  Sabine Lindberg todos en la manada lo saben pero no era un amor reciproco" Claro que también estaba el hecho de que yo era menos de lo que él esperaba, el gran Klaus Nordraak no podía vivir sabiendo que tenía un hijo débil, pero como mi mamá siempre decía " Al diablo con él y su poder"

Acelere el paso rumbo a la barra de comidas, estaba repleto tome dos bandejas y comencé a llenarlas lo mas posible mientras mi estomago producía un rugido bestial y escandalosa " Casi suena como si hubiese una guerra dentro de mi estomago" mientras las bandejas se desbordaban de comida, una dona desaparecía en mi boca.

Termine y  hice mil malabares ambas charolas hasta la mesa, comenzando a atiborrar me de comida como nunca, siempre habíamos comido mucho pero quizá era Luciana banana y yo quien comíamos menos los vástagos Nordraak; Mientras devoraba una pierna de pavo observe una figura familiar caminando hacía mi, por un minuto pensé en lo extraño que era mirarlo ahí pero después me di cuenta al echar un vistazo a mi alrededor que no había absolutamente nadie mas en el lugar " Con razón se aparece Asger el inmortal" trague la comida y sonreí a mi hermano.

Él llego y se sentó frente a mi sin decir nada, me miro y por un momento me dio miedo, Asger nunca me había hecho nada pero sentía que se debía al hecho de que me veía con muy poca esperanza de amenazar su posición anhelada " Ser jefe de una manada me interesa tanto como ponerme a dieta... una reverenda mierda! " y él lo sabía.

- ¡As!  ¿Cómo estas? ¿Quieres pavo? Esta rico en serio - intente dejar de comer pero me fue imposible mis dedos inquietos pellizcaban la comida y la metía a mi boca masticando, aunque si comí  mas moderadamente estando ya Asger junto a mi.

Tras pasar algunos minutos de vagar por el campamento llego al comedor buscando un lugar donde estar tranquilo, abrió la puerta y al ver el que estaba vacío entro; caminó hasta la mesa más apartada para sentarse en ella con algunos documentos en mano, documentos que aún tenía que revisar tras la muerte de su madre "madre”, su ceño se frunció tras pensar en ella y en lo que había ocurrido y se acomodo dispuesto a concentrarse en ello. Leía aquellos papeles cuando escucho la puerta de nuevo.

Y ahí estaba él, el menor de los Nordraak haciendo ruido hasta para caminar, siempre despreocupado en su aspecto. Le siguió con la mirada desde su posición hasta verlo llegar a la barra de alimentos donde el ruido de platos y cubiertos metálicos no se hicieron esperar mientras llenaba de comida aquellas dos bandejas que había tomado y al parecer no se había percatado siquiera de que no estaba solo en aquel edificio.

Cerro la carpeta de los documentos y noto como su hermano empezaba a comer sin vergüenza alguna tras llegar a una de las tantas mesas, ¿Quién podía culparlo? Al fin de cuentas, ellos no eran unos simples humanos, sus cuerpos consumían cantidades de comida mayores y con mas frecuencia. Se levantó de su asiento con los documentos en mano y camino hasta donde estaba el, haló la silla frente al mas joven y se sentó en esta dejandoensilla nto a su lado los papeles evitando así que pudieran mancharse.


Miro fijo a Vanja sin decir nada escuchando lo que el decía para luego simplemente seguir comiendo, negó con la cabeza un poco tras su ofrecimiento cruzando sus bazos sobre la mesa.

-Eres tan distraído que no has notado siquiera que no estabas solo en este lugar- comentó sin el afán de llamarle la atención.

El pavo estaba sabroso en casa mi mamá siempre preparaba pavo o cerdo realmente no recuerdo comer mucha res o ternero hasta que salí de casa, de hecho todo mundo pensaba que yo era extraño, con mis clásicas tonterías.

El primer año fue muy difícil pero Mikael, Asger y Luciana cuidaron de mi todo el tiempo; Mire a Asger y le sonreí mientras me miraba, aunque su mirada parecía tan fría el en realidad sonreía... no lo hacía a menudo pero tenía claros recuerdos de verlo sonreír he incluso de haberle sacado sonrisas aunque lo cierto era que mis hermanos eran raros.

Mire a mi hermano con cierta sorpresa arrugue la nariz y me encogí de hombros.

-Enserio estabas aquí? - Ni siquiera sentí su presencia... bueno el hambre me hacía actuar de formas raras o mas bien yo era el raro, me encogí de hombros de nuevo y reí - Sabes que soy distraído As - murmure llevando me otro pedazo de pavo a la boca - Enserio esta muy bueno - dije mordiendo la pieza de nuevo.

Negó con la cabeza un par de veces por lo dicho por su hermano, el cual estaba mas entretenido en su pavo que en otra cosa. El verlo comer le traía recuerdos de su hogar, en el, pocas veces se habían sentado juntos a la mesa, parecía que eso se había vuelto mas frecuente cuando salieron llegaron a aquel campamento.

Pero las cosas no siempre duran y aquello que parecía haberse vuelto algo cotidiano fue volviéndose como en casa, extraño. Al pensar en aquello frunció su ceño ya que se había sumergido en sus en sus propios recuerdos mientras miraba a un punto fijo sin prestar atención realmente. Levanto la mirada y veía a su hermano aún comer por lo que relajo el semblante.

-¿No has tenido noticias de tu madre?-pregunto con solo para sacar alguna conversación, no tenía humor para alguna platica que le hiciera perder la poca paz ganada en aquel lugar sin las bulliciosas humanas chillando como ratas cuando pasaba cerca de ellas.

Se recargo en la silla y llevo la mano a su cabello peinándolo con los dedos.

Me encogí de hombros y de unas mordidas mas observando los alrededores, habían cambiado las ventanas, eran de madera y panorámicas los jardines lucían mucho más esplendidos a medio día y era justo la hora feliz, era agradable ser solo nosotros dos contemplando la comida y los rosales.

Asger negó lo cierto es que esperaba dicha respuesta, mientras daba unas mordidas al pavo aun tenía grabado en la mente el momento en que mi madre me había despertado a media noche hacía un mes ya, sus palabras no lograba digerirlas aun "La mamá de tus hermanos falleció "  volví a sentir el mismo escalofrío que aquella noche me despertó en la espalda recorriendo mi cuerpo entero.

Desde entonces no veía cara a cara a Asger no sabía que pasaba por su mente durante todo el funeral estuvo serio, tranquilo y calculador como era su costumbre por lo que mi pésame fue lo mas sincero y tranquilo posible.

Rasque mi mejilla y baje la pieza de pavo, repentinamente había perdido el apetito.

- No mucho solo me dijo lo que ya sabes, papá se pasea con su hijo por todo el pueblo comentando con todos lo fuerte y digno que sera - solté una risa mientras me limpiaba las manos con una toalla húmeda - Sabes creo que le gusta repetir historias con esta mujer como quiera que se llame hizo lo mismo que con tu madre aun estando casado poco le importo, estoy consiente que la relación de ellos no iba bien pero lo engendro cuando yo tenía 6 años- Hice a un lado las charolas - ¿Ahora que excusa pondrá? "Ho Vanja olí tu debilidad y decidí regar mis semillas un poco mas..." - apreté los puños, tiempo atrás llegue a sentirme culpable por la separación de mis padres pero hoy en día sabía exactamente lo miserable que era el hombre al que llamaba padre.

- Ya no hablare más de eso - El último año me había sentido extraño, más hambre, más enojado, más fuerte entre otras cosas suspire y deje caer mi cabeza sobre la mesa, di un largo suspiro para relajarme aun así mi cabeza era un horno tenía la sensación de tener los ojos en ebullición la misma que me daba cada que mis ojos relucían en un dorado extraño; Me puse los lentes que llevaba sobre mi cabeza y me cruce de hombros suspirando  mas fuerte.

-Sabes algunas veces tengo ganas de... ¡Aaahhhh! - hice un ademan con mis manos como si fuese a ahorcar a alguien.


-Tengo miedo Asger... ya no soy el mismo- murmure con sinceridad a mi hermano - Creo que algo extraño me esta pasando - tenía enojos repentinos y terribles deseos hacía los que me molestaban, ese no era él yo de siempre... algo estaba despertando en mi.